De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), México ocupa el primer lugar en estrés laboral, con un 75% de trabajadores estresados.
En situaciones de estrés aumenta la secreción de cortisol, considerado “la hormona del estrés”, que en condiciones normales se libera para mantener un equilibrio en diferentes funciones del organismo y mantenernos alerta, sin embargo, cuando hay una secreción constante debido al estrés crónico (también llamado distrés), puede provocar efectos negativos.
Existe también un tipo de estrés positivo, llamado eustrés, una reacción natural del organismo que se convierte en un estímulo para enfrentar nuevos retos, nos mantiene alerta, además mejora la atención y el rendimiento. Es un tipo de estrés que se presenta por periodos cortos.
Los efectos negativos del estrés crónico pueden ser tanto a nivel físico como psicológico, y un mal control puede causar problemas de salud como:
Alteraciones psicológicas:
Alteraciones físicas:
También se ha observado que el estrés tiene impacto sobre la microbiota, al provocar cambios en el tipo y número de microorganismos que habitan en el intestino causando una disbiosis (desequilibrio).
Es importante identificar oportunamente si se padece estrés y sobre todo si está causando un impacto negativo en la salud.
El llevar a cabo los consejos mencionados, además del consumo frecuente de bacterias probióticas como Lactobacillus casei Shirota puede ayudar en gran medida a evitar los efectos producidos por el estrés. ¡Consúmelos diariamente!