Los antioxidantes pueden prevenir o retrasar el daño que causan sustancias como tabaco, la contaminación y hasta rayos solares a las células del cuerpo.
Algunos antioxidantes naturales son vitamina C y E, zinc, selenio y ahora también son considerados los probióticos, debido a que:
Incluye una dieta rica en antioxidantes a través del consumo de arándanos, manzana, brócoli, jitomate, cítricos, frutos secos y probióticos como los Lactobacillus casei Shirota que equilibran la microbiota intestinal.