Este probiótico pertenece al grupo de bacterias ácido lácticas, que requieren para su reproducción azúcares como glucosa y lactosa.

Al ser consumidos los LcS emprenden un gran viaje en el sistema digestivo:

1.Ingresan al estómago donde sobreviven a los jugos gástricos y sales biliares.

2.Llegan vivos al intestino donde la temperatura corporal es ideal para su reproducción.

3.Generan ácido láctico que favorece los movimientos intestinales y limita el crecimiento de bacterias nocivas.

4.Permanecen 48 horas en el intestino y después son evacuados.

Ahora ya sabes el recorrido que realizan los LcS en tu cuerpo. ¡Consúmelos diario y fortalece tu microbiota intestinal!